(Kingston) – Como parte del proyecto que se está ejecutando actualmente en el Caribe, UNLIREC Y el Gobierno de Jamaica llevaron a cabo la destrucción de aproximadamente 2.000 armas de fuego. El proceso, que tuvo lugar el 7 de febrero en una fábrica de cemento en Kingston, se coordinó y ejecutó en conjunto con las autoridades jamaiquinas. Al igual que en todos los procesos de destrucción de armas en los que participa UNLIREC, este proceso cumplió con todos los requisitos internacionales de seguridad y verificación. Se incautaron parte de las armas destruidas durante las operaciones policiales. El resto incluía armas obsoletas que pertenecían a la policía y a las fuerzas armadas. En las próximas semanas, UNLIREC proporcionará al Gobierno de Jamaica cizallas hidráulicas especialmente adaptadas para desactivar las armas de fuego incautadas y obsoletas hasta que se destruyan, evitando así su posible reingreso en las redes de tráfico ilícito.
Además, el 10 de febrero se destruyeron 12.000 cartuchos de munición en la Academia de Policía de Jamaica, utilizando un tanque diseñado específicamente para la destrucción segura de la munición y garantizando al mismo tiempo un mínimo impacto ambiental. Jamaica es el tercer país que utiliza este tanque, el cual ya ha sido implementado por UNLIREC en Ecuador y Trinidad y Tobago.
Durante la ceremonia de destrucción de armas, el Ministro de Seguridad Nacional de Jamaica, Peter Bunting, declaró que “la destrucción de estas armas ayudará a reducir el riesgo de desviación hacia el tráfico ilícito”. El ministro, al agradecer a UNLIREC la ayuda ofrecida a Jamaica, señaló que “el Ministerio de Seguridad Nacional considera que estas medidas son un primer paso importante para supervisar y regular eficazmente el número de armas de fuego disponibles para uso ilícito. Los delitos con armas de fuego representan una importante amenaza para la seguridad de nuestra sociedad, por lo que estamos agradecidos por el apoyo significativo para ayudar a reducir la disponibilidad de armas de fuego y así ayudar a proteger nuestra democracia”.
Además, como parte de este proyecto, UNLIREC realizó el Curso Interinstitucional de Capacitación para la Lucha Contra el Tráfico Ilícito de Armas de Fuego (CIIC) que dio lugar a la capacitación de 60 oficiales con responsabilidad directa en la lucha contra el tráfico ilícito de armas de fuego. Como resultado directo, estos agentes estarán mejor equipados para combatir el tráfico ilícito de armas de fuego, municiones y explosivos, e impedir que las armas lícitas entren en las redes de tráfico ilícito y reducir los niveles de impunidad de los traficantes de armas.
Jamaica tiene una de las tasas más altas de homicidios relacionados con armas de fuego de la región. Las iniciativas emprendidas por este Estado insular demuestran su compromiso con la lucha contra el tráfico ilícito y la reducción de la violencia armada en la isla caribeña. En los últimos años, la calidad de las armas utilizadas por los grupos criminales de Jamaica ha sido igual o superior a la que poseen las autoridades de represión. Ello ha dado lugar a un aumento de los crímenes mortales.
En el último año, UNLIREC ha colaborado con el Gobierno de Jamaica para elaborar un plan de acción nacional sobre la gestión de arsenales y la destrucción de armas de fuego. Las actividades del proyecto esbozadas en ese plan se llevarán a cabo durante todo el año. La implementación de este plan de acción, financiado por los Gobiernos de Canadá y de los Estados Unidos, comprende la entrega de instrumentos para mejorar la seguridad de los arsenales nacionales, el desarrollo de cursos de capacitación para combatir el tráfico ilícito de armas de fuego y el mejoramiento de la gestión de arsenales y la destrucción de armas de fuego. También se mejorará la asistencia jurídica para que la legislación pueda armonizarse con las disposiciones correspondientes que figuran en los diversos instrumentos internacionales relacionados con el desarme.