El 14 de julio, el Centro Regional de las Naciones Unidas para la Paz, el Desarme y el Desarrollo en América Latina y el Caribe (UNLIREC) llevó a cabo el foro virtual regional para los países de América Latina, el cual se enfocó en la medición de la violencia contra las mujeres y la presencia e impacto de las armas de fuego. Durante el foro los países presentaron diversas iniciativas y políticas para medir la frecuencia y los efectos de las armas de fuego presentes en la violencia contra las mujeres.
La Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia de la Nación de Argentina presentó la metodología que se emplea para el registro y análisis de los femicidios cometidos con armas de fuego. Por su parte, la Dirección General de Estadística y Censos (DIGESTYC) de El Salvador resaltó el Observatorio de Estadísticas de Género. Asimismo, Intersecta Organización para la Igualdad compartió los hallazgos de un estudio reciente sobre violencia de género y armas de fuego en México, resaltando la importancia de otras fuentes complementarias, además de los registros administrativos para comprender mejor la verdadera magnitud de la violencia armada contra las mujeres.
Asimismo, como parte del programa el Centro de Excelencia para Información Estadística de Gobierno, Seguridad Pública, Victimización y Justicia (UNODC-INEGI) presentó un marco estadístico para la medición del femicidio, mientras que la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) se enfocó en los avances y desafíos en la medición de las tasas de femicidio en América Latina.
En el evento mostró el impacto negativo de las armas de fuego cuando están presentes en las diferentes expresiones de violencia contra las mujeres y los desafíos existentes para determinar y contabilizar los feminicidios. La recopilación exhaustiva de datos es fundamental para construir una base de evidencias que sirva para la elaboración de políticas con el fin de prevenir y eliminar este tipo de violencia.
En este evento participaron representantes de las áreas de control de armas, seguridad, prevención de violencia contra las mujeres, género, justicia, estadísticas, entre otros sectores públicos y atrajo la participación de Argentina, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Panamá y República Dominicana, así como representantes de Naciones Unidas, organismos regionales y sociedad civil.
Este evento fue financiado por la Unión Europea y forma parte del proyecto “Apoyo para la integración de la perspectiva de género en políticas, programas y acciones en la lucha contra el tráfico y el uso indebido de armas pequeñas, en consonancia con la agenda de Mujeres, Paz y Seguridad”.